Un año después... Dr. Stone

Testing Manga 87 - Dr. Stone (5 de septiembre de 2018)

Con el permiso de Shingeki no Kyojin, algo menos presente en mi día a día al ser de publicación mensual, estoy en situación de decir que Dr. Stone es actualmente mi manga favorito. Ninguno me produce la sensación de satisfacción que consiguen los inventos de Senkuu y las interacciones entre el maravilloso abanico de personajes que nos presenta. Los diálogos, los gags, el increíble dibujo, la historia sabiendo mantener el interés... Es cierto que el guión es muy tramposo y fluye hacia donde más le interesa, pero si el premio es que cada capítulo me deje con una sonrisa al finalizarlo, bienvenido sea. Cualquier elogio por mi parte no va a ser nunca suficiente. 

El anime está en emisión y, sin estar mal, no llega a alcanzar la genialidad de la obra original. Era previsible, me parece un producto con muchas dificultades de llevar en esencia a la animación. Espero que al menos valga para dar más visibilidad al manga y que no tenga ningún impedimento para seguir editándose con la tranquilidad de saber que muchos estamos pendientes de cada detalle de esta maravilla.

SPOILERS

Un tanque de papel, un globo aerostático, una cámara de fotos y ahora un dron. Estos serían algunos de los inventos más destacables de Senkuu en este periodo. Cada uno de ellos con su proceso, la aportación de otros personajes y sus sonadas reacciones. Entre invento e invento hay una historia, vital para unir todos estos momentos con el mayor sentido. Y por qué no decirlo, cada vez más interesante. La guerra contra Tsukasa terminó de forma imprevisible dentro de la previsibilidad. El hombre primate se evangelizó, lo cual era probable, pero no contaba con el giro de Hyouga. Qué chetados estaban estos dos, madre mía. Si no es por algunos truquitos, cualquiera de ellos se hubiera llevado por delante a todo el reino de la ciencia. Uno de estos trucos fue sacar a la palestra a Mirai, la hermana de Tsukasa. Diría que introducir este elemento en ese momento fue algo sucio, pero ya habíamos podido ver a Mirai en una de las ilusiones de los primeros capítulos en las que se nos muestra a Senkuu y Tsukasa siendo amigos si hubieran crecido juntos. Bien jugado, aunque me sigue pareciendo regular.

La batalla estuvo bien, sí, pero de su resolución recibimos un premio aún mayor: Yo. Este personaje deleznable me ha hecho reírme a carcajadas con algunas de sus intervenciones. Dice que es policía y el rayo petrificador le pilló meando en una pared. Cada enfrentamiento con Magma es oro, estando en lo más alto su invención de una barca que había construido allí mismo de cualquier manera. Yo mantiene una dura competencia en mi mente por ser el personaje más gracioso frente a Ginrou. ¿Cuál de los dos es más patético? Me moría de risa con Ginrou preguntando por su chocolate varias veces en la página en la que presentan San Valentín. Actualmente, haciéndose pasar por mujer, también está dejando buenas perlas. Destaco el flashback en el nos hace creer que aprendió a escribir junto a Kinrou y realmente estaba jugando con una peonza.

Que la petrificación y despetrificación se conviertan en la cura perfecta me parece un giro genial. Dejamos a Tsukasa criogenizado y nos vamos en busca del hombre del "¿Por qué?" o "whyman". Y vuelvo a hablar de personajes, porque este camino nos lleva a la aparición de un nuevo pilar de la serie como es Ryusui. Reconozco que me dio un poco de miedo al principio, cuando se le atisbaba un fondo egoísta y oscuro en sus primeras intervenciones, pero no tardó en descubrirse como uno más del grupo, con sus bondades y sus golpes de humor. Muy pronto cae como víctima del engaño de Senkuu y Gen alrededor del dinero y comenzamos a verlo con los mejores ojos. Estupendos gags los relacionados con los dragos y los caretos de estos dos rodeados de billetes viendo que todo les sale a pedir de boca. Aprovecho para decir que amo al artesano Kaseki. Me encanta el protagonismo que ha ido ganando y su ilusión por construir lo que le toque.

A bordo del Perseo, el grupo toma un desvío para conseguir el platino, lo que aplaza la trama del whyman y nos ofrece una nueva en la que curiosamente aparece el arma petrificadora. En principio, y antes de que aclaren nada, me parece demasiada casualidad que la nave de los últimos supervivientes esté en la misma isla que aquellos que petrifican gente, pero vamos a esperar a ver si tiene algún sentido. Más allá de la notable trama de infiltración, también disfrutamos entre risas con Kohaku haciéndose la delicada y besando a Labo-kun. Casi tanto disfrute como el de Senkuu y compañía descubriendo que su ayuda en el barco era el maldito Ginrou. Entre los malos quiero destacar a Ibara, con un diseño que inspira mal rollo real y que tiene toda la pinta de que va a pillar el escondite del grupo. Kohaku ya ha sido descubierta, así que la batalla está a nada de sucederse.

Para ir acabando, voy a intentar predecir un par de cosas sencillas. En el Perseo se llevaron a Hyouga y Homura, así que entiendo que en algún momento tendrán un papel relevante en este enfrentamiento con los isleños y que no debería demorarse demasiado. Taiju se ha traído del fondo del mar a una persona desconocida de pelo largo, la cual es evidente que no ha sido por nada, así que a ver qué nos encontramos. Me da un poco de pena que los despetrificados por segunda vez eliminen las cicatrices que la primera petrificación les había dejado. Esos dedos negros chasqueantes de Ryusui eran ya un icono.

Dr. Stone en el último año

Se mantiene

Nota para Ruff: 9