Testing Manga 64 - Kimetsu no Yaiba - 16 de marzo de 2017
Con Kimetsu no Yaiba he podido disfrutar de uno de mis momentos preferidos escribiendo este blog, que no es otro que comprobar cómo de un año a otro he cambiado de opinión favorablemente hacia un manga. En su momento describí esta serie como entretenida, sin alardes y cumplidora. Y, en cierta manera, sigo manteniendo esa opinión. En este tiempo no ha introducido ninguna nueva variante ni ha modificado especialmente su desarrollo. Y entonces, ¿por qué ahora mismo es de los mangas que más disfruto al leer cada semana? No estoy muy seguro, pero voy a intentar aclarármelo.
Creo que las claves de esta mejora son varias y difíciles de detectar. La autora, de manera paulatina, ha conseguido una gran química entre los protagonistas, transmitida también hacia el lector. Además, el desarrollo de los miembros del grupo se ha visto ayudado por la unión al mismo de manera temporal de nuevos personajes. Esta ampliación de los aliados y la presentación del elenco de enemigos han ayudado a dar mayor profundidad a la historia. Sumémosle también que las batallas han mejorado. La progresión desde los primeros capítulos ha sido la adecuada y en estos últimos meses hemos tenido unos muy buenos combates. Sin giros extraños, sin idas de olla. Se ha respetado enormemente a los rivales y se han presentado enfrentamientos acordes al nivel de batalla del grupo.
Otro de los cambios que he detectado es el aumento de carga cómica, sobre todo en los momentos de menor peso argumental. Las etapas entre sagas son más ligeras y son utilizadas para ver a los personajes en un ambiente más distendido. Esto se ha hecho notar mucho en el dibujo, simplificado incluso en exceso en ocasiones para transmitir relajación y buen humor. Hay un gran número de viñetas, y hasta páginas enteras, en las que no hay ni una sola cara dibujada correctamente. Cabezas que son óvalos, ojos que son puntos, y bocas inexistentes. A veces me cuesta discernir entre lo gracioso y lo chapucero, la verdad.
En términos generales, no hay duda alguna de que la evolución que está siguiendo la serie la lleva hacia el mejor camino posible, mostrándonos un constante crecimiento
sin abandonar en ningún momento su esencia. Y lo hace tan bien y tan
fluidamente que hasta me cuesta encontrar las palabras adecuadas para
intentar describirlo. Finalicé mi anterior testing comparando la obra con
un alumno estándar, lejos del sobresaliente pero también del suspenso.
Pues este alumno ha encontrado su método y con trabajo intenso ha
llegado al notable. Y si ahora mismo tuviera que apostar, diría que la
próxima vez que me leaís sobre él estará cerca del sobresaliente. Entre el público general todavía no está haciendo mucho ruido, pero estoy seguro de que esto cambiará en el próximo año, en el que no sería nada raro que se anunciara su anime.
SPOILERS
Si bien señalo que la calidad de la obra ha aumentado debido a la evolución adecuada de aspectos que ya mostraba, es de recibo comentar que argumentalmente también ha dado un paso adelante a través del Aliento Solar. Por lo que podemos saber, se trata de una técnica de batalla especial que sólo algunos elegidos pueden utilizar. Como no podía ser de otra manera, nuestro protagonista es capaz de usarla, aunque no sabemos concretamente la razón de ello. En su batalla contra Daki, la chica demonio experimenta una visión de Muzan en la que se ve a un hombre usuario del Aliento Solar. Hombre al que volvemos a ver en el flashback de un Tanjirou convalenciente, en el que un familiar suyo lo recibe en su casa. No estoy seguro de la identidad de ese familiar, ya que en principio no podría ser su padre ya que Tanjirou revela que éste tenía una marca de nacimiento en la frente, así que podría ser alguien anterior. O quizás sí que es su padre y la marca, símbolo de los elegidos, aparece más tarde o algo así, ya que el propio Tanjirou no nació con ella y dice que se la hizo en un accidente cuando era pequeño. Todo esto se anima aún más cuando vemos que el Upper Moon número uno tiene una pinta muy similar a la del misterioso espadachín de los recuerdos. ¿Es él tras rendirse a Muzan? ¿Su hermano? Cuanto menos interesante.
La muerte de Rengoku fue un palo tremendo que sirvió, entre otras cosas, para hacernos ver el poder real de los Upper Moon. Sin medias tintas. Cuatro golpes del número tres fueron suficientes para que el pilar cayera. Con el contexto ya establecido, pudimos ver una épica batalla contra la pareja demonio número seis con multitud de fases y despliegue de técnicas. El protagonismo se repartió de una forma inmejorable entre todos los personajes a lo largo del enfrentamiento, dando lugar a una de las mejores batallas que he visto en un manga en mucho tiempo. Por cierto, ¿qué pasa con Nezuko? Sus poderes van más allá de los de un demonio normal en términos de fuerza y regeneración, pero es que también ha mostrado una habilidad a base de fuego capaz de eliminar veneno o anular las técnicas de otros demonios, como vimos cuando quemó las cuerdas de Enmu. Lo más fácil es pensar que la sangre de la familia Kamado es especial, pero es probable que haya algún girito por ahí.
Kimetsu no Yaiba en el último año
Mejora
Nota para Ruff: 7.25
Yo estuve leyendo hasta el cap 64 pero no publicado mas capa en la pag, me gusto mucho y quisiera saber donde los lees tu?
ResponderEliminarEn inglés se pueden leer al día en varias páginas. En castellano sí que van algo más atrasados.
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